domingo, 31 de julio de 2011

¿Quinotos o Kinotos?

Cada tanto tenemos una discusión con mi madre acerca de como se escribe esta palabra, ella dice kinoto ("porque es de esas palabras que uno recorta cuando te piden palabras con k en el colegio") y yo digo quinoto (no se muy bien porqué, siempre pensé que era como kiosko que se escribe de ambas formas...). Así que decidí buscarla en el diccionario de la Real Academia Española y averigué que se dice quinoto y quiosco ;).

¿Recuerdan que tenía 2 kilos 400 gramos de quinotos? Bueno los dejé madurar en su bolsa antes de convertirlos en dulce. 

Así que después de una semanita y antes que se pongan feos, porque siempre maduran desparejos y un quinoto puede contagiar a todos los demás, empezamos con el proceso para la producción del dulce. 

Es la receta de mi abuela y me llevó un tiempo poder interpretarla correctamente. Comenzamos por lavarlos y pesarlos. Luego los pinchamos varias veces con un tenedor, y esto es muy importante para el resultado final, y los colocamos en un bol. Los cubrimos con agua y los dejamos así toda la noche. 

Al día siguiente descartamos esa agua. En una cacerola colocamos la misma cantidad de agua que lo que pesamos de los quinotos, agregamos 3/4 tazas de azúcar por cada litro de agua y un par de clavos de olor. Cuando el agua calienta, agregamos los quinotos que habíamos reservado. Y dejamos que llegue a hervor.

Aquí viene el segundo secreto: una vez que hierve, bajamos el fuego y lo dejamos cocinar. Aproximadamente a la media hora apagamos el fuego y lo dejamos enfriar. Volvemos a prender el fuego y volvemos a repetir el mismo procedimiento. En total son 3 veces, en la última dejamos que tome el punto que nos guste antes de sacarlo del fuego y envasarlo en frasco esterilizado.

A mi mamá y a mi tía les encanta esta mermelada. En este caso usamos quinotos de quinta y el resultado fue un sabor similar a la naranja amarga. Y ya que a mis hermanas no les gusta comerlo entero, a una parte de la producción la procesamos para obtener un dulce más parejo.




sábado, 30 de julio de 2011

Los ñoquis del 29

Los 29 existe una tradición: comer ñoquis y poner la plata debajo del plato como un ritual para tener más plata. Mi amiga Gaby nunca se olvida de este ritual, ni aún estando de vacaciones en Turquía! 

Ayer fue 29 así que decidimos cocinar ñoquis para cumplir con esta cábala. Pero no unos ñoquis cualquiera sino rojos, así que marcharon unos de papa y morrón asado :). Y acompañados de crema de leche para no tapar su sabor.

Así que volviendo del trabajo pasé por el super para conseguir los ingredientes que nos faltaban (y aprovechar el descuento por supuesto ;)). 

Mientras hervíamos la papa, no una papa cualquiera sino una de esas gigantes que se consiguen hoy en día, asamos el morrón. Para luego pelarlo y procesarlo...debo admitir que temí por la integridad de mi cocina ya que todavía aparecen esas manchas rojas en la pintura del techo que son restos del dip de morrón que voló hace hace casi 4 años.

Con todos los ingredientes listos: el puré de papá, el morrón procesado, un huevo, sal y pimienta, sólo quedaba agregar la harina en igual proporción y unir todo para luego estirar en gusanitos y cortar los ñoquis.

El resultado final ¡un plato riquisimo!


Lo que sí, nos olvidamos lo más importante...poner la plata bajo el plato!!

domingo, 10 de julio de 2011

Sabor de madre

Hoy no comimos en casa así que no nos tocó cocinar. Sin embargo disfrutamos de la especialidad de mi madre: milanesas de pollo :).

Sí, blancas (de pechuga) y negras (pata-muslo). Y no supremas, milanesas. Nadie más que mi madre ha desarrollado en la familia la habilidad y la paciencia para pelar los huecitos ;). La acompañamos con unas papas hervidas con aceite y un poco de sal.

Y de postre, budín de mandarina, trabajo de mi hermanita. Suave y esponjoso. Especialmente pensado para ser tostado en los días venideros (la debilidad de las mujeres de la familia).

Nos volvimos a casa pipones, con unas rodajas de budín y una bolsa de 2,40 kilos de quinotos para hacer la mermelada de mi abuela :).